Pulpo frito
Si alguna vez ha pedido un plato de pulpo carbonizado deliciosamente carnoso y tierno en un restaurante e inmediatamente ha pensado: “Vaya, ojalá pudiera hacer algo así en casa”, pues puede hacerlo. Y esta receta te va a iluminar el camino. Tanto si quieres deslumbrar a tu compañía en tu próxima cena como si quieres hacer algo muy especial para una cita nocturna, este plato de pulpo a la parrilla merece la pena para salir de tu zona de confort culinario. Aunque pueda parecer intimidante, preparar pulpo en casa es más fácil de lo que imaginas. El pulpo se puede encontrar en tiendas especializadas (como Whole Foods), pescaderías y mercados asiáticos o internacionales. La clave para preparar este delicioso marisco en casa es darle a la carne una cocción previa (independientemente de cómo se vaya a preparar) para ablandarla. En esta receta, primero cocinamos el pulpo a fuego lento en un sabroso líquido de cocción lleno de aromas y, a continuación, terminamos la cocción en la parrilla para que adquiera un sabor caramelizado y crujiente. Nos encanta cómo esta preparación del pulpo es tan rica en sabor, pero para nada pesada. Acompañado de una ensalada de baby bok choy, este plato es tan elegante como reconfortante.
¿Tengo que hervir el pulpo antes de asarlo?
Siempre lo hiervo primero, luego lo dejo enfriar a temperatura ambiente y lo hago rápidamente a la plancha, para que quede bien chamuscado. Luego lo aliño con aceite de oliva, zumo de limón, sal, pimienta, orégano seco, perejil fresco y ajo (opcional).
¿Cuánto tiempo se tarda en cocer el pulpo a la parrilla?
Precaliente una parrilla exterior a fuego medio-alto y engrase ligeramente la rejilla. Ase el pulpo hasta que esté carbonizado por todos lados, de 3 a 4 minutos por cada lado. Retírelo del fuego, córtelo en trozos y colóquelo en una fuente de servir. Rocíe con aceite de oliva virgen extra y exprima limón por encima.
Receta de pulpo
Cocinar pulpo puede parecer intimidante para el cocinero poco confiado, pero no es tan complicado como podría pensarse. Se conoce como polpo en Italia, pulpo en España y oktapodi en Grecia. Los españoles son los que más pulpo consumen en Europa, pero su consumo sigue estando muy por detrás del de los japoneses, que prefieren el tako, que se come en forma de sushi, sashimi, ensalada tako sunomono o el famoso takoyaki, un plato callejero que consiste en bolas de pulpo fritas. El magnífico pulpo mide hasta 80 cm y tiene ocho suculentos tentáculos que son todo un festín. La carne del pulpo es mucho más dura que la de otros cefalópodos, como el calamar o la sepia, por lo que los cocineros de todo el mundo han ideado distintas estrategias para ablandarla. En el Mediterráneo, los pescadores golpean a los pulpos contra las rocas; hay quien jura cocerlos en cobre, masajearlos con sal o cocerlos a fuego lento con corchos de vino. Algunos cocineros modernos incluso lo meten en una bolsa y lo centrifugan en la lavadora. Si se manipula con un poco de cuidado, estas técnicas extremas no deberían ser necesarias: basta con cocerlo a fuego lento.
Marinado de pulpo a la parrilla
Cebollas en escabeche rápido:Aderezo:printerImprimir esta listaInstruccionesEsta receta es una forma sencilla de cocinar el pulpo. Cuando se asa en la barbacoa, el pulpo absorbe todos los bellos aromas ahumados. Acompañado de una ensalada de tomate fresco y cebolla encurtida, es el plato perfecto para las noches calurosas de verano.Consejos de la receta:Es importante no cocer ni poco ni demasiado el pulpo, ya que se pondrá duro. Para evitar la necesidad de hervir el pulpo para ablandarlo, utilice un termómetro de carne para medir su punto perfecto. La temperatura interna final del pulpo es de 55°C. Consejos para asar a la parrilla: Es importante no cocer ni poco ni demasiado el pulpo, ya que se pondrá duro. Para evitar tener que hervir el pulpo para ablandarlo, utilice un termómetro de carne para medir su punto perfecto de cocción. La temperatura interna final del pulpo es de 55°C.
Pulpo estofado
Si quiere probar un plato clásico griego, ¡el pulpo es imprescindible! Con esta sencilla receta de pulpo a la griega, podrá cocinar esos tentáculos a la perfección con un proceso sencillo que, además, realza su sabor natural.
Durante muchos años he sido reacia a cocinar esta pequeña delicia en casa, a pesar de que era una gran fan cuando visitaba una taberna local, ¡especialmente durante mis viajes veraniegos por las islas! Hasta que un día decidí superar mis miedos y probarlas.
Me sorprendió descubrir que, en realidad, no hay mucho que hacer. Hervirlo hasta que esté hecho pero todavía “crujiente”, freírlo para que quede más crujiente y desglasarlo con especias mediterráneas frescas y ouzo. Y ¡qué delicia!
Asegúrate de no añadir agua al pulpo, ya que soltará suficiente agua por sí solo. Tampoco añadas sal, ya que el pulpo ya está suficientemente salado, y ten cuidado de no cocinarlo demasiado porque se pondrá blando.
Añade las cebollas cortadas en rodajas y los tomates troceados a la sartén, junto con 1-2 cucharadas de aceite de oliva y un diente de ajo o dos, y remueve. Déjelo cocer durante 5 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que las cebollas se caramelicen.